La importancia del apoyo psicológico ante niños con necesidades especiales

El nacimiento de un hijo representa un cambio radical en la organización de la familia, esto requiere de un espacio físico y emocional. ¿Pero qué sucede cuando el niño tiene alguna necesidad especial?

Cuando en una familia nace un niño con una discapacidad surgen una serie de movilizaciones internas que reclaman un proceso de cambio, duelo y elaboración.

La forma de responder y reaccionar de los padres ante este hecho depende de varios factores: la manera en que fueron criados los padres, la habilidad y experiencia para enfrentarse a este tipo de problemas, el grado de dificultad o de discapacidad, el lugar que ocupa el niño en la familia, la calidad y naturaleza de los sistemas de apoyo que tuvieron los padres al enterarse de la situación, la forma en que se comunicó la noticia, y la estabilidad de las relaciones familiares.

Por lo general, la primera reacción de los padres es resistirse a comprender la realidad, distorsionándola en ocasiones para hacer la situación más llevadera. En la mayoría de las familias el proceso pasa por una serie de fases:

  • Desarrollar la capacidad de enfrentarse a la nueva situación
  • Esforzarse positivamente
  • Buscar soluciones terapéuticas para el desarrollo del niño.

Otras de las dificultades proviene del día a día. Un niño con necesidades especiales necesita más tiempo y atención por lo que la rutina diaria deberá ser adaptada a los tiempos necesitados.

Aunque es un proceso de adaptación largo y complicado, con positivismo y ayuda de profesionales como puede ser el apoyo psicológico tanto para el niño como para los componentes de la familia.

Mediante la ayuda psicológica también se podrán despejar las preguntas e inquietudes que pueden despertarles las dificultades de su hijo y asistirlos en el control de la ansiedad y angustia que la conflictiva del niño pudiese generarles.

Según la psicóloga Yaiza Antelo Carracedo:

“Los resultados actuales indican que aunque el proceso es muy largo y doloroso, si las familias disponen de recursos, pueden adaptarse realizando esfuerzo y con persistencia. Para lograr que este proceso sea lo más llevadero posible es muy importante el apoyo psicológico a todos los miembros de la familia y una atención temprana para intervenir precozmente en los problemas que presenta el niño/a con discapacidad y su familia.”

La ayuda psicológica beneficiará a la totalidad del ámbito familiar, dando respuestas a preguntas que pueden surgir en momentos complicados y mejorando el día a día de nuestros pequeños para que todos seamos felices.